Masajes: beneficios para tus pies 

Los masajes pueden ayudarte a que tus pies se sientan mucho más descansados. Sigue estos consejos y podrás obtener todos sus beneficios.

Imagina esto: acabas de tener un día larguísimo en el trabajo en casa o afuera, y después de eso, lo único que quieres es descansar y relajarte un rato. La realidad es que muchos nos prepararíamos un snack e iríamos a ver televisión, pero eso poco o nada hará por los músculos que necesitan destensarse.
Permanecer sentados durante muchas horas puede causar múltiples problemas, como mala circulación, mala postura, obesidad y en general las consecuencias del sedentarismo.

Por otro lado, si pasamos el día de pie, también puede verse en detrimento nuestra salud, aunque en principio es mucho mejor que estar sentados. Esto puede ocasionar problemas en las plantas de los pies, fatiga y tensión de los músculos.
Así, los que resultan más perjudicados al terminar nuestra jornada, con algunas excepciones según nuestras actividades, son nuestros pies. Puede que sean una de las zonas que menos atención reciben en la rutina diaria, aunque están expuestos a muchos agentes que pueden maltratarlos.

¿Qué puede afectar nuestros pies?

El pie es un miembro importantísimo de nuestro cuerpo. Es el que nos mantiene conectados al suelo y en equilibrio. Está formado por numerosos huesos y por almohadillas blandas que hacen que sea más cómodo pisar. Esta complejidad en su diseño es delicada, puesto que debemos mantenerlos en las condiciones adecuadas para que estén sanos.
Muchos de los problemas que aparecen en los pies no son genéticos; más bien se deben al descuido que solemos tener hacia esta parte del cuerpo.
Hay muchos factores que pueden cansar y afectar tus pies si no se tienen los cuidados necesarios. Algunos problemas de los pies pueden ser leves o superficiales, como uñas encarnadas o callos, pero otros pueden ser más severos, como los que implican dolor más agudo, por ejemplo, la metatarsalgia, la fascitis plantar, los juanetes, las verrugas y el pie plano (2).

Todas estas son afectaciones que pueden ser hereditarias o simplemente causadas por el uso de calzado muy ajustado, sumado a estar durante mucho tiempo de pie o sentados, como ya lo mencionamos
Al sostener nuestro peso durante todo el día, también es normal que puedan estar cansados en extremo.

Un masaje te puede ayudar

masajes

Un masaje consiste en presionar, apretar o dar pequeños golpecitos en diferentes zonas del cuerpo con el objetivo de relajar los músculos o aliviar el dolor.
Ya sea que quieras relajarte o disminuir el dolor en los pies, los masajes son una buena opción. La fisioterapia lleva mucho tiempo utilizándolos para la recuperación de la movilidad y para el mantenimiento de los músculos. Tú también puedes ayudarte de estas técnicas para sentirte mejor.
Pero ¿cómo sé si un masaje me puede ayudar? Hay algunos signos que te indicarán que tus pies están fatigados y que podría venirte bien consentirlos:

Hinchazón
Pesadez
Dolor

Ventajas de los masajes

Las ventajas de los masajes son muchas, aquí te mencionamos algunas para que te animes :

  • Te olvidas del estrés. Aparte de aliviar el dolor, podrás sentirte más descansado y relajado.
  • Te ayudan con el dolor de los músculos. Si los has forzado, frotarlos con un masaje hará que se destensen y se reduzca el dolor.
  • Promueven la movilidad. Algunos pueden ayudarte a mantenerte más activo, pues implican movimiento de los músculos, como es el caso de algunos masajeadores automáticos.
  • Mejoran la circulación. Si tienes más movilidad, tienes mejor circulación también.
  • Te pueden ayudar a controlar la ansiedad. Por sus propiedades relajantes, pueden ayudarte a permanecer más en el presente y a conectarte con tu cuerpo.
  • ¿Te gustaría disfrutar de esos beneficios? Entonces te contamos los pasos para dar o darte buenos masajes. ¡Tus pies no volverán a estar adoloridos!

Cómo dar un masaje

Rutina para antes de los masajes

masaje y velas

Los masajes son una forma de consentirnos, por eso, es conveniente procurar la experiencia completa para una mejor relajación. Algunas recomendaciones para que disfrutes más de tus masajes son:

  • Busca un espacio y un momento de tranquilidad, donde no tengas alguna actividad urgente que realizar, así no tendrás que interrumpir tu sesión.
  • El tacto es el principal sentido que entrará en función, pero si puedes tener música tranquila, e incluso algo de aromaterapia, podrás crear un ambiente realmente agradable para ti.
  • Controla tu respiración antes y durante el masaje. Para ello, respira profundamente y sé consciente de ello. Será un factor extra de relajación.
  • Además, debido a que vas a intervenir con los músculos, puede que algunos masajes sean un poco dolorosos, y tener una correcta respiración sin duda te ayudará a sentirte mejor durante el proceso.
  • Por último, es recomendable remojar tus pies en agua tibia o caliente con sal durante unos minutos para bajar la inflamación.

Diferentes tipos de masajes para pies

Ahora que ya tienes ese momento para dedicarlo al cuidado de tus pies, te contamos que hay algunas técnicas de las que te puedes valer para hacer un masaje correcto y más o menos superficial, según la que elijas. Antes de realizar cualquiera, te recomendamos hacer algunos estiramientos para que estés más destensado desde el principio.

Masajes sencillos usando solo las manos. Empezaremos con un básico que te servirá para que tus pies se sientan cómodos y descansados. Este tipo de masajes lo puede hacer cualquiera, e incluso puede ser un automasaje: solo tienes que untar un poco de crema hidratante o aceite para después ejercer presión con los pulgares a lo largo de toda la planta del pie y las articulaciones de los dedos. Pon mayor atención en las zonas que sientas más adoloridas después de un día de labores; puedes ayudarte de tus nudillos o del codo para mayor profundidad. Al final, tendrás como resultado unos pies hidratados y relajados.

Masajes con una pelota. Este masaje es más profundo. Para realizarlo, necesitarás tener una pelota de goma de unos cinco centímetros de diámetro. El siguiente paso es ponerte de pie y colocar la pelota bajo uno de tus pies como si la estuvieras pisando. Debes usar tu peso para apoyarte en ella. Primero, colócala en el metatarso, que es la parte anterior a los dedos.

Apoyando los dedos sobre la pelota, como si la estuvieras agarrando, mantén el talón como eje y haz un movimiento en forma de abanico. Pásala ahora por el arco y no dejes de lado los puntos que te sean un poco dolorosos, pues significa que necesitan mayor atención. Solo recuerda hacerlo cuidadosamente y escuchar a tu cuerpo. Después de cinco o diez minutos, puedes pasar al otro pie.

Masajes con masajeador. Una forma muy práctica de hacer un automasaje es con la ayuda de un masajeador de pies. Los hay de distintas características, pero los mejores son los que simulan la técnica shiatsu, pues se basa en la acupresión, que aplica la presión y el movimiento necesarios en los puntos más importantes. Además, ciertos modelos más sofisticados, como Leg Action, pueden ser utilizados también para masajear los gemelos y el sóleo, que son músculos de las piernas.

Esto hará que haya menos tensión sobre los talones y mejorará el flujo de la sangre hacia los pies también. Otra ventaja de estos masajes es que puedes realizar otras actividades mientras los recibes, pues no necesitas utilizar tus manos. Puedes leer, ver televisión, tejer o cualquier otra actividad en la que puedas estar sentado al tiempo que consientes tus pies.

Qué no hacer

Ahora que ya sabes todo lo que puedes hacer para beneficiarte de los masajes, te hablaremos un poco de aquellas prácticas que es mejor evitar para no convertir lo que debería ser un momento de descanso en un riesgo para nuestra salud. Sobre todo, recuerda que, antes que nada, hay que hacer una visita al médico si tienes incomodidades mayores o sospechas de algún padecimiento grave de los pies. Aquí algunas de las malas prácticas en el mundo de los masajes para pies:

No te apresures. Tómate tu tiempo y siente cada paso del masaje. Esto te ayudará a ser más consciente de tu cuerpo y a identificar aquellas zonas de tus pies en las que necesitas poner más cuidado.

No presiones tu cuerpo de más. Si sientes molestias agudas al realizarte un masaje, lo mejor es que desistas y consultes a un profesional de la salud.

Revisa atentamente las contraindicaciones para los masajes de pies. No te arriesgues a que alguna condición médica se contraponga con este recurso. Te contamos más al respecto a continuación.

Quiénes no pueden recibir un masaje

A pesar de las bondades de los masajes que ya mencionamos, hay personas para las que están contraindicados. En general, los masajes son buenos para cualquier persona, según la intensidad y la zona del cuerpo, claro. Recuerda que, justamente, la intención de cuidar tus pies es mantener un estilo de vida más saludable en todo sentido, por lo que es mejor abstenerse de recibir un masaje si tienes alguna de las siguientes condiciones:

  • Personas con problemas de sangrado.
  • Pacientes que toman medicamentos anticoagulantes.
  • Personas con sensibilidad extrema en la piel, ya sea temporal (como en el caso de quemaduras) o permanente.
  • Individuos con heridas en la piel o músculos.
  • Aquellos con osteoporosis.
  • Individuos con huesos rotos o infecciones.
  • Gente con trombosis.
  • Personas con inflamaciones graves.En general, lo que hay que comprender sobre los masajes es que pueden ser unos auxiliares geniales para cuidar nuestra salud y estar más descansados y relajados, siempre y cuando sigamos las recomendaciones necesarias para no lastimarnos y pasar un mal rato.En Leg Action quisimos compartirte todas las bondades de los masajes, pues sabemos que el ritmo de vida actual y durante la pandemia han cambiado el modo en el que nos movemos. Se ha vuelto cada vez más necesario buscar los recursos para mantenernos en movimiento aun dentro de casa, que es el espacio principal ahora.Esperamos que puedas tener una sesión de masajes maravillosa y que le digas adiós al dolor y al cansancio de pies después de un día arduo. ¡En Leg Action nos preocupamos por ti!

Referencias

Mosley, M. (2014). “¿Realmente estar de pie es bueno para la salud?”. BBC. Recuperado de https://www.bbc.com/mundo/noticias/2014/11/141030_mitos_medicos_realmente_sentarse_finde_dv

Medline Plus (2020). “Lesiones y enfermedades del pie”.. Medline Plus. Recuperado de https://medlineplus.gov/spanish/footinjuriesanddisorders.html

Calleja Robledo, Elena (2008). “Fisioterapia de las patologías del pie”. eFisioterapia. Recuperado de https://www.efisioterapia.net/articulos/fisioterapia-las-patologias-del-pie

Mayo Clinic (2021). “Masajes, conoce todos sus beneficios”. Mayo Clinic. Recuperado de https://www.mayoclinic.org/es-es/healthy-lifestyle/stress-management/in-depth/massage/art-20045743

Junquera, Í. (2016). “Ejercicios, estiramientos y masajes para tratar la fascitis plantar”. Fisio Online. Recuperado de https://www.fisioterapia-online.com/videos/ejercicios-estiramentos-y-masajes-para-tratar-la-fascitis-plantar